La dieta planetaria busca incentivar una alimentación sostenible que no solo mejore la salud individual sino también el planeta. Entre otros, el objetivo es contribuir a disminuir el impacto del cambio climático. Ahora, una evaluación realizada por investigadores de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard (Bostón, Estados Unidos) ofrece datos sobre los beneficios que también aporta para las personas.
A partir de datos de más de 200000 personas, se llegó a la conclusión que aquellos cuyas dietas se acercaban más a la denominada Dieta de Salud Planetaria (PHD, según sus siglas en inglés) tenían un 30% menos de riesgo de muerte prematura en comparación con quienes tenían menos adhesión a este forma de alimentarse. A esto se sumó un menor riesgo de fallecimiento por las principales causas de muerte, entre las que se incluyen el cáncer, las enfermedades cardíacas y las respiratorias.
El modelo de plato planetario saludable y respetuoso con el medioambiente divide la mitad del plato para verduras y frutas. La otra mitad debe contener granos enteros, proteínas vegetales (legumbres, frutos secos y semillas), aceites vegetales insaturados (como el aceite de oliva) y, de forma opcional y en cantidades reducidas, fuentes de proteína animal.
Así, la dieta planetaria recomienda el consumo de 2.500 kilocalorías al día y se apoya en el aumento de la cantidad y variedad de frutas, verduras, frutos secos y legumbres. De este modo, también se modera el consumo de alimentos de origen animal y a la carne se agregan los lácteos. En líneas generales, esto implica disminuir el consumo de productos ultraprocesados y carnes procesadas. En todo caso, esta dieta es flexible y puede adaptarse tanto a las tradiciones gastronómicas locales como a las preferencias individuales.
Pautas para seguir la dieta planetaria
Además de la distribución saludable de los alimentos, esta propuesta recomienda acciones que tiendan a cuidar el ambiente y guiarse por los ritmos naturales de la tierra. Entre ellas, se destacan:
- Comprar cerca de casa
- Consumir productos de cercanía y de estación
- Elegir productos ecológicos
- Consumir menos carne
- Cocinar de manera eficiente para ahorrar energía y dinero
- No tirar comida
- No utilizar plástico
- Reciclar
Fuente: Cuidate Plus